Senderos por la selva tropical. Imponentes cascadas. Cumbres de montaña. ¡La isla es un paraíso para los amantes de la naturaleza! El Jardín Botánico de Madeira, con más de 2000 plantas exóticas, es una visita obligada tanto para los amantes de la naturaleza como para los que aprecian los bellos paisajes.
Las costas occidentales de Madeira albergan charcas marinas naturales, pueblos pesqueros tradicionales, imponentes acantilados y frondosos bosques. En la costa este, descubra pueblos tradicionales donde podrá sumergirse en la cultura local.
Con platos como el pastel de Madeira, vinos tradicionales, atún fresco con salsa de ajo y orégano y la "espetada" (carne cocinada al carbón en grandes brochetas), aquí encontrará una gran variedad de delicias locales para deleitar sus papilas gustativas. En Funchal, explore el Mercado dos Lavradores, un mercado local que vende frutas y verduras, flores y pescado.
Cada año, la isla acoge una celebración llamada Vindima, una vendimia anual con espectáculos y música que normalmente se celebra entre agosto y septiembre.
¿Le apetece tomar el sol este invierno? Madeira es conocida por su clima cálido durante todo el año. En invierno, las temperaturas pueden mantenerse fácilmente en el rango de los 20 grados.
Siéntese, Relájese. ¡Sienta el sol en su cara! No hay mejor lugar para hacer esto que Funchal, la capital de la isla, que ofrece unas vistas impresionantes de la isla. También puede dirigirse a la playa de Seixal con su arena negra y enmarcada por paisajes montañosos y costas vírgenes.
"Madeira es un destino de vacaciones verdaderamente hermoso. El faro de Ponta do Pargo es una visita obligada. El faro data de la década de 1920 y tiene unas vistas espectaculares de la isla. También puede planificar una excursión de un día a este lugar, ya que hay varios magníficos restaurantes cerca.
Si toma el teleférico desde Funchal, explore el histórico jardín tropical Monte Palace. Si está buscando una joya escondida, aventúrese hasta las charcas naturales de Porto Moniz en el norte, formadas por rocas volcánicas y con aguas azules cristalinas.
Recomendaría encarecidamente sumergirse en la cultura local y probar platos tradicionales: desde el pastel de miel de Madeira hasta el pez espada con plátano, el maíz frito y el Bolo do Caco (un pastel parecido al pan). No olvide acompañarlo con un chupito de Poncha, un licor de diferentes sabores, ¡incluido el de maracuyá!".
La mejor manera de explorar la isla es mediante recorridos de senderismo. Elija entre aproximadamente 2400 kilómetros de senderos con una excursión por las "levadas". Desde la cascada hasta la costa, hay un sendero para todos los niveles de forma física.
Los teleféricos de Funchal ofrecen una vista panorámica de la isla y le llevarán a Monte, donde podrá deslizarse cuesta abajo por un tobogán tradicional. ¿Qué le parecería explorar las montañas desde el cielo y tomar el teleférico de Rocha do Navio?
El aeropuerto de Madeira (FNC) ofrece vuelos internacionales y goza de una excelente ubicación a solamente 20 minutos de Funchal. Asegúrese de investigar sobre las opciones de transporte público para los servicios de autobús y transporte. También puede alquilar un coche si prefiere la flexibilidad de moverse por su cuenta.
Aunque los meses de primavera y verano son una época popular para programar una visita, diciembre ofrece climas suaves y espectaculares fuegos artificiales. Con los mercados de Navidad y las celebraciones de Año Nuevo, únase a las festividades locales para una experiencia verdaderamente inolvidable.
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